DESPIDO NULO PARA EL SINDICALISTA DE CGT EN BAXTER
- Una Sentencia del Juzgado de lo Social de Huesca declara que la empresa vulneró los derechos sindicales del secretario de organización de la sección sindical
- La empresa deberá readmitir al trabajador, abonarle los salarios de tramitación e indemnizarlo con 7501 euros por vulneración de derechos fundamentales.
Contundente sentencia del Juzgado de Lo Social Único de Huesca que declara nulo el despido del sindicalista de CGT, Elías M.R., por parte de la empresa BIEFFE MEDITAL S.A. (BAXTER), ubicada en Sabiñánigo.
Elías fue uno de los fundadores de la Sección Sindical de CGT en la empresa y ejercía como secretario de organización. La sección fue constituida en marzo de 2023 y el despido se produjo en diciembre del mismo año, tras su participación activa en asambleas de la empresa celebradas unas semanas antes.
La empresa BAXTER, que tiene cerca de 500 trabajadores se dedica a la fabricación de productos farmacéuticos dentro del sector químico, se enfrenta ahora a una sentencia que considera probado que “el despido es consecuencia de una represalia o como reacción a la actividad sindical del trabajador”.
El Comité de Empresa, compuesto íntegramente por UGT, mostró desde el primer momento una actitud de inacción y falta de apoyo. Se trata de un sindicato subordinado a los intereses de la empresa, que deja desprotegida a la plantilla.
Desde CGT desde el primer momento tuvimos claro que era una clara vulneración de derechos sindicales. Por ese motivo el 17 y el 24 de febrero decenas de sindicalistas de CGT nos concentramos ante las puertas de la fábrica en señal de protesta y apoyo al compañero despedido.
Elías ha manifestado:
“Esta victoria no es solo mía, es un triunfo colectivo que demuestra que la defensa de nuestros derechos es posible cuando actuamos con unidad y determinación. Quiero expresar mi más profundo agradecimiento a la Confederación General del Trabajo (CGT) y a cada compañero y compañera de la sección sindical de CGT por su inestimable apoyo. Vuestra presencia activa en las manifestaciones y asambleas, y la defensa de nuestra posición sindical, han sido pilares clave en este proceso.”
Asimismo, añade:
“Mi despido fue una represalia directa por mi labor sindical y por promover mejoras en nuestras condiciones laborales y salariales, vulnerando así la libertad sindical y el derecho a la tutela judicial efectiva.”
En CGT lo tenemos claro esta sentencia nos da la razón y lanza un mensaje claro a la empresa:
“No se pueden pisotear los derechos de los trabajadores impunemente.”
