CGT hace un llamamiento al profesorado para participar en las movilizaciones contra el genocidio en Palestina, presionar al Gobierno del Estado español para romper relaciones con el gobierno de Benjamín Netanyahu y bloquear cualquier colaboración pública o privada con el Estado de Israel.

En relación a los graves acontecimientos que están ocurriendo en Palestina con la ofensiva militar israelí en Gaza y los casos de abusos y asesinatos en Cisjordania, el sindicato de Enseñanza de CGT quiere manifestar la necesidad de redoblar la solidaridad con el pueblo palestino para detener la masacre que se está produciendo en los territorios ocupados por Israel. En ese sentido, pedimos a nuestra militancia, y al resto de docentes y trabajadoras de los distintos ámbitos educativos, la participación activa en las manifestaciones de denuncia del genocidio que se está cometiendo con el asesinato de miles de civiles, desplazamientos forzados de población, y destrucción de instalaciones básicas como hospitales, escuelas y viviendas. Exigimos al gobierno de Pedro Sánchez que rompa relaciones con el gobierno de Benjamín Netanyahu, que está cometiendo crímenes de guerra antes la pasividad de la comunidad internacional.

Desde CGT animamos a trabajar en los centros educativos la denuncia de lo que está ocurriendo. Son muchos los recursos pedagógicos, y material histórico, para trabajar en las aulas una situación que es inaceptable y que está suponiendo un genocidio brutal. Desde documentales como “Gaza” o “Nacido en Gaza” hasta el análisis de lo que son “Crímenes de guerra” definidos en el estatuto establecido por la Corte Penal Internacional, pasando por la creación del estado de Israel y los incumplimientos de las resoluciones de la ONU, clave para entender el conflicto actual. Tutorías, clases de Historia, Educación en Valores Cívicos y Éticos… son variados los espacios donde podemos trabajar con nuestro alumnado. La legislación educativa nos insta a ello; en su preámbulo dice:

Así, la educación para el desarrollo sostenible y la ciudadanía mundial ha de incardinarse en los planes y programas educativos de la totalidad de la enseñanza obligatoria, incorporando los conocimientos, capacidades, valores y actitudes que necesitan todas las personas para vivir una vida fructífera, adoptar decisiones fundamentadas y asumir un papel activo –tanto en el ámbito local como mundial– a la hora de afrontar y resolver los problemas comunes a todos los ciudadanos del mundo. La educación para el desarrollo sostenible y para la ciudadanía mundial incluye la educación para la paz y los derechos humanos, la comprensión internacional y la educación intercultural.

Modificación de artículo 1:
«e) La formación para la paz, el respeto a los derechos humanos, la vida en común, la cohesión social, la cooperación y solidaridad entre los pueblos así como la adquisición de valores que propicien el respeto hacia los seres vivos y los derechos de los animales y el medio ambiente, en particular al valor de los espacios forestales y el desarrollo sostenible.»

Por citar solo dos ejemplos de la legislación actual, que nos insta y nos da el marco para trabajar en el aula una situación grave, que puede trastocar la situación internacional.

Pedimos también la colaboración con las iniciativas que están enviando ayuda humanitaria a la zona y con las organizaciones de derechos humanos que están trabajando con enormes dificultades desde allí. Tampoco olvidemos que el bloqueo informativo en Gaza está mermando el conocimiento de los acontecimientos, en una clara vulneración del derecho internacional. Por último hacemos un llamamiento a la no colaboración con empresas y organismos que estén colaborando con el estado de Israel y su régimen de apartheid.

Foto Arainfo, manifestación contra el Genocidio en Gaza, en Zaragoza.