El anuncio por parte de la administración de que los y las mediadoras del Centro Aragonés de Recursos para la Educación Inclusiva (CAREI) serán contratados y contratadas a partir de enero de 2022 supone, según denuncia CGT, un serio perjuicio a los centros educativos y en especial a las familias más desfavorecidas provenientes de culturas con base lingüística diferente al castellano.

Estas personas realizan una labor indispensable de traducción y mediación cultural entre las familias y los diferentes profesionales de la educación sin la cual, en muchas ocasiones, no es que se dificulte la comunicación, sino que simplemente se imposibilita.

Este servicio de mediación intercultural está coordinado por el CAREI y financiado por el Departamento de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón, y es absolutamente imprescindible a la hora de posibilitar una acogida digna y una pronta integración social y escolar tanto de las familias como del alumnado que llega a nuestras aulas provenientes de culturas como la árabe, la china, la de países de la Europa del Este o del África subsahariana.

Asimismo, si bien el papel de estos y estas profesionales resulta de una importancia capital a lo largo de todo el curso escolar, se vuelve aún más importante en el inicio del mismo, cuando se incorpora la inmensa mayoría del nuevo alumnado y cuando se tramitan algunas de las ayudas y becas a las que estas familias pueden optar. La falta de los y las mediadoras cuya contratación ha decidido retrasar la administración hasta enero puede suponer que estas familias no puedan acceder a esas ayudas.

Por todo ello, desde CGT exigimos a la administración educativa aragonesa que se contrate inmediatamente a los y las mediadoras del servicio de mediación intercultural para que los centros educativos y las familias puedan contar ya con sus servicios.